Con el paso del tiempo, los equipos y productos eléctricos han mejorado notablemente hasta el punto de hacernos a todos la vida mucho más fácil que hace apenas 50 años.
No obstante, todos estaremos de acuerdo en que a menudo, estas mejoras presentan un lado oscuro: Los aparatos tienden a estropearse mucho más que antes, por lo que se requieren muchas más reparaciones y cambios. Esto mismo se refleja, por ejemplo, en el caso de los coches, y concretamente con sus alternadores y accesorios electrónicos.
A día de hoy, los coches vienen equipos con pequeñas computadoras que se ocupan de funciones internas. Funciones esenciales como poder utilizar la energía eléctrica que se necesita para el correcto funcionamiento de todos los sistemas eléctricos del aire acondicionado, los faros, el audio u otros accesorios eléctricos cuyos niveles de energía se renuevan gracias al alternador del coche.
El alternador se encarga concretamente de transformar la energía mecánica en electricidad, así como de almacenarla en la batería. Es por lo tanto uno de los componentes más importantes del coche, motivo de más para tenerlo siempre en buen estado y evitar mayores problemas.
Como el resto de elementos del coche, el alternador trabaja en equipo, en este caso especialmente con la batería. Por ello, también es importante contar con una batería en buen estado y de calidad, ya que en caso contrario el alternador sufrirá las consecuencias.
Por otra parte, otros despistes como dejarse las luces encendidas mucho tiempo sin querer, o abusar del motor del coche cuando éste no está en marcha, pueden ser muy perjudiciales si se realizan con frecuencia para el alternador y la batería.
Otros elementos, esta vez que no dependen de nosotros, pero que también afectan al estado del alternador son las temperaturas muy frías o muy cálidas.
Con la climatología, claro está, poco podemos hacer… El frío y el calor extremo, como hemos comentado en más de una ocasión, perjudica a estos componentes.
La vida útil del alternador puede superar los 200.000 kilómetros, siempre y cuando se tengan en cuenta estas situaciones adversas y malos hábitos, se realicen las revisiones pertinentes en tu taller de confianza y se sigan los consejos que os damos desde MegaTaller Gruas Cecilio, en Granada.
¿Cómo podemos saber que el alternador de nuestro coche está roto o desgastado?
Identificar los síntomas de que el alternador está en mal estado es muy sencillo, ya que de su correcto funcionamiento dependen muchas piezas del coche.
Algunos ejemplos son:
Luz del alternador
La mayoría de coches tienen un mecanismo de alerta para señalar que está fallando el alternador. Siendo este piloto de luz uno de los signos más fáciles de identificar.
Ruidos raros
Otro signo sencillo de identificar son los ruidos procedentes del desprendimiento de partes móviles, como una correa en mal estado. Las correas defectuosas en el alternador son muy fáciles de localizar al hacer una revisión visual del coche ya que presentan agrietamientos.
Efectos en los accesorios electrónicos
Es bastante obvio que si muchos de los componentes eléctricos de nuestro coche dependen del buen funcionamiento del alternador, notemos que este no funciona bien tras percibir algún efecto en estos accesorios. Si se presentan estos problemas y no se reparan en un taller a tiempo, puede ser necesario tener que terminar cambiando también la batería.
Voltaje de la batería
Si tenemos un voltímetro digital podremos comprobar los niveles de voltaje de las salidas de la batería. Para saber con exactitud que el problema es del alternador y no de la batería, se tendrá que probar la tensión de salida con el coche apagado y luego con el coche encendido. Si en la primera prueba el voltaje se mantiene en 12V, la batería funciona correctamente, si en la segunda el voltaje está por debajo de 13,8V, entonces podemos concluir que el alternador no está cargando la batería correctamente y que por lo tanto será necesario llevar el coche al taller para que sea revisado por un profesional.