Nuestro coche, como nuestro organismo, nos manda señales cuando algo no está bien. Aunque no siempre estas señales indican problemas de gravedad, si que deben tenerse en cuenta para solucionarlos cuanto antes y no dar lugar a que se produzcan daños mayores y más costosos de reparar.
A continuación os presentamos algunas de las señales más graves que puede mandarnos nuestro vehículo y que, por tanto, pueden poner en peligro nuestra seguridad:
- Ruidos inusuales en el motor, al arrancar o al ponerlo en marcha.
- Temperatura del motor elevada o poco estable.
- Pérdidas de líquido y fluidos en juntas y manguitos.
- Vibraciones en el volante, los pedales o la correa de transmisión.
- Ruidos y holguras en la dirección, suspensión, transmisión o frenos en circulación.
Al notar alguno de estos problemas, es recomendable acudir al mecánico de inmediato, ya que, por ejemplo, en el último caso, podría deberse a que el sistema de amortiguación no absorbe las irregularidades del asfalto, lo que nos obliga a hundir más el freno para detener el coche o las marchas oponen más resistencia a cambiarse.
Otras señales que nos manda nuestro coche y que debemos tener en cuenta
–Problemas con la batería. Si el testigo de la batería se enciende cuando el coche está en marcha, podría estar indicando un fallo en el alternador o una sobrecarga o descarga en el circuito eléctrico. Si el problema es con el voltaje de la batería, veremos que en la primera prueba el voltaje se mantiene cerca de los 12V, mientras que en la segunda está por debajo de 13.8V. Esto indicaría que el alternador no está cargando la batería correctamente, por lo que sería necesario recurrir a un mecánico que revise y cambie el sistema.
-Si escuchamos un ruido procedente del desprendimiento de alguna parte móvil, también podría tratarse de un fallo en el alternador. Puede ser una correa suelta o desgastada, y por tanto comprobarse con una mera inspección visual.
–Piloto encendido del aceite. Si el piloto del aceite se enciende estando en marcha, deberemos parar el coche inmediatamente y verificar el nivel del aceite. Si el nivel del aceite es normal, la causa puede ir más allá, por lo que deberemos llevar el coche al taller.
–Alerta de la temperatura del líquido de refrigeración. Lo normal es que la luz de la temperatura del líquido de refrigeración se apague cuando el motor está funcionando. En el caso de que se encienda con el motor en marcha, indicaría un aumento en la temperatura del líquido de refrigeración. Si ocurre esto, lo adecuado es parar el coche y dejar el motor al relentí, sin acelerar en uno o dos minutos. En este caso la temperatura deberá disminuir, si no ocurre así, y comprobamos que el nivel del líquido de refrigeración es el adecuado, es motivo de llevar el vehículo al taller cuanto antes.
–Testigo de freno ABS. El testigo de freno deberá estar apagado cuando ponemos el motor en marcha. En caso de que el piloto se encienda en funcionamiento podría indicar un nivel bajo en los circuitos o un problema en el sistema de frenado, así que deberemos parar el vehículo.
En Megataller Grúas Cecilio disponemos de maquinaria y profesionales cualificados para realizar revisiones y mantenimiento de la electricidad del automóvil y mecánica de los vehículos de distintas marcas.
Es recomendable comprobar regularmente las baterías y circuitos eléctricos de los coches. De esta manera conseguimos un funcionamiento óptimo del vehículo. En nuestro taller disponemos de piezas fundamentales para posibles sustituciones y averías al mejor precio.